miércoles, 27 de mayo de 2009

Further Complications: lo nuevo de Jarvis Cocker

Luego del más que aceptable Jarvis (2006), el sarcástico ex líder de Pulp sorprende con su segundo disco solista. Cocker decidió subir la apuesta, se juntó con el productor Steve Albini (Nirvana, Pixies) y creó un verdadero disco de rock. Los resultados, como dije, sorprenden. No porque el inglés no tenga talento (le sobra), sino porque se atrevió a hacer algo totalmente distinto a lo que había hecho hasta ahora. Y le salió más que bien. Es un trabajo muy al palo, con una clara influencia de Nick Cave, y con un Jarvis en plena forma vocal y lírica, con sus habituales observaciones agudas. Pero Cocker no se olvida de las baladas, entregando un par de lentos memorables.
Acá les dejo un breve comentario sobre cada una de las canciones.

  1. Further complications: una canción bien rockera, con guitarra, bajo y batería al palo. Marca el tono para lo que seguirá después y es la primera en la que se vislumbra la influencia de Nick Cave.
  2. Angela: sigue en la línea de la anterior. Armada sobre un persistente riff de guitarra cuya fuerza lleva adelante a la canción y compensa la falta de una melodía memorable.
  3. Pilchard: en este tema cuasi instrumental (Jarvis sólo balbucea unos sonidos guturales) la velocidad no decae, con una batería que domina el sonido y riffs de guitarra que van y vienen, un poco a là Gang of four.
  4. Leftovers: aparece la primera (gran) balada del disco. Típica de Jarvis, con su habitual teatralidad, cantando, recitando y susurrando la letra. Uno de esos casos en que el intérprete hace a la canción mejor de lo que es.
  5. I never said I was deep: sin solución de continuidad, Cocker nos agarra con la guardia baja y nos zampa otra gran balada. Aquí, hace gala no sólo de su elegante forma de cantar, sino de su habitual ironía. “Nunca dije que era profundo / Pero soy profundamente superficial / Mi falta de conocimiento es amplia / Pero mi horizonte es angosto”. Claro que no le creemos ni media palabra.
  6. Homewrecker!: un temazo. Una mezcla entre Morphine, con un saxo al palo, y Nick Cave, en el que Jarvis termina aullando como nunca antes, tirando a la mierda su elegancia en favor del alarido rockero.
  7. Hold Still: de regreso a la balada, éste tal vez sea el tema menos destacado. Una relajada melodía, con arreglos suaves de guitarra, piano, batería y coros. No está mal, pero suena medio transicional en el contexto del disco.
  8. Fuckingsong: otro tema al palo. Batería al frente, y otro riff de guitarra que lleva a la canción de la mano.
  9. Caucasian blues: más rock, lo que llegando casi al final ya confirma la naturaleza del disco. Otra buena muestra de que Jarvis tenía bien claro el tipo de trabajo que quería lograr. Y de que sabía cómo hacerlo.
  10. Slush: distinta al resto, esta canción tiene un sonido etéreo, con guitarras que fluyen sutilmente detrás de la voz de Cocker. Me hace acordar un poco a The Jesus & Mary Chain.
  11. You’re in my eyes (Discosong): una rareza. El tema que cierra el disco dura casi 9 minutos y es una especie de balada entre elegante y cool, mezcla de Cave, Steely Dan y Barry White, que bien podría llevar la firma de Mike Patton.

En conclusión, un gran trabajo. Y con cada escucha me gusta más. Creo que va a estar entre mis favoritos de este año. Ojalá que Jarvis salga de gira a presentarlo. Y que si viene a Argentina yo pueda ir a verlo, no como la vez anterior, que me lo perdí por estar de vacaciones. Agendas encontradas, la mía y la de Jarvis...
Le doy 8 Damiancitos.

viernes, 15 de mayo de 2009

Un Discazo


Le dedicamos sólo unos minutos al aire, dijimos algunas palabras y escuchamos una sola canción. Nada más. Pero un disco tan ecléctico y tan bien ejecutado, merece más.

I Can Hear The Heart Beating As One (1997), de Yo La Tengo, supone el punto más alto en la búsqueda sonora de este grupo de culto del indie norteamericano. Su música te lleva, te trae, te vuelve a llevar y te daja ahí; y al finalizar, te queda la sensación de haber estado en muchos lados. Sonido noise, shoegazer, neo psicodelia, arreglos vocales, canciones instrumentales que duran diez minutos, otras más cortas, el pop más simple y hasta la bossa nova conviven en este viaje sonoro sin perder el espíritu under.

Un disco para disfrutar de punta a punta, sin detenerse. Para sentarse y dejarse llevar. Y una vez concluído el viaje, la sensación será de admiración hacia una banda que busca y encuentra.

A continuación, les dejo el disco para escuchar y el link para descargarlo:



http://www.divshare.com/playlist/545752-0c3


miércoles, 6 de mayo de 2009

Señoras y señores, con ustedes, STOMP

Dedíquenle cinco minutos de sus vidas a ver y escuchar a estos ingleses que hacen música con cualquier cosa menos con instrumentos. Verdaderamente increíbles. Las palabras, sobran.